Egresado de Galileo en la Antártida

Egresado de Galileo en la Antártida

Dentro del grupo de profesionales que instalaron una antena satelital en la base McMurdo se encuentra el Ing. José Sosa, graduado de la Ingeniería en Telecomunicaciones y Redes Teleinformáticas de FISICC.

Es un profesional guatemalteco que tiene una interesante historia que contar de lo que vivió en el Polo sur. Se trata del Ing. Jose Guillermo Sosa Lopez quien es egresado de Facultad de Ingeniería de Sistemas, Informática y Ciencias de la Computación (FISICC) de Universidad Galileo, estudió la Ingeniería en Telecomunicaciones y Redes Teleinformáticas.

Él fue parte un equipo de guatemaltecos que instaló una antena satelital de 13 metros en la Antártida, continente que circunda el Polo Sur. Allí vivió en la McMurdo Station por tres meses. El Ing. Sosa trabaja para una empresa guatemalteca de telecomunicaciones que se dedica a la instalación, equipamiento y pruebas de equipo satelital tanto en nuestro país como alrededor del mundo.

También puedes leer: El futuro no está determinado, sigamos construyéndolo

Según relata el profesional esta oportunidad surgió luego de conocer acerca de un proyecto lanzado por del programa de La Antártida de Estados Unidos, patrocinado por la National Science Foundation (NSF), al que se postularon para realizarlo y fueron elegidos.

“Luego nos informaron acerca de los términos y condiciones, a lo que íbamos a enfrentarnos estando allá, también nos indicaron que habría una fase previa, que es una preparación física y mental”, cuenta el profesional.

Otro artículo que puede interesarte: Meetups: Lugar de encuentro virtual

La antena satelital instalada en la Estación McMurdo permite a los científicos
compartir sus descubrimientos con el resto del mundo.

Todo lo anterior para que estuvieran listos para estar en un lugar completamente separado del mundo. La buena salud es muy importante para trabajar en La Antártida porque aunque hay una clínica médica en la estación, no es tan grande como para tender casos graves de enfermedad o lesión.

Por otro lado, como medida de seguridad por el COVID-19, los guatemaltecos pasaron por cuarentenas en Estados Unidos y en Nueva Zelanda. Además, los protocolos continuaron ya instalados en la McMurdo Station de Antártida para garantizar la salud de todos. El grupo estuvo conformado por diez profesionales involucrados en el mismo ámbito de Ingeniería, con conocimientos de Telecomunicaciones.

“Algunos son compañeros que llevan varios años trabajando en esto, otros estamos comenzando con dos o tres años de experiencia. La misión era instalar una antena satelital de 13 metros en un periodo de 2 meses aproximadamente”, detalla el entrevistado.

El equipo de guatemaltecos fue contratado para instalar una antena satelital de 13 metros.

Para qué era la antena

Para empezar, el Ing. Sosa explica que para comunicarse en algunas regiones se cuenta con algún medio físico, como un cable de red, pero hay lugares en donde el acceso a medios físicos no es factible. “Por ejemplo, ¿por qué vamos a tirar un cable a una región en medio de la selva? No es productivo. Ahí es donde surge el método de comunicación satelital, que es básicamente poner una antena para enlazarse a un proveedor satelital que nos dará los servicios de voz, datos, internet y lo que se solicite”, explica.

En La Antártida la comunidad científica que está día a día haciendo sus investigaciones de cualquier tipo necesita compartir este conocimiento e información con el resto del mundo.

“Pero el único medio que existía para compartirlo era una antena que tiene alrededor de 30 años de existir en una región que está como a 20 millas. Y el tema de mantenimiento y sostenibilidad es complicado, principalmente en invierno, cuando el único medio que se tiene para llegar a ella es un viaje en helicóptero y con temperaturas entre los 30 y 40 grados bajo cero, con vientos que alcanzan entre los 60 y 80 km por hora, no es factible”, comparte.

Lo aprendido en Universidad Galileo le ha permitido al Ing. Sosa ser reconocido en su profesión.

Añade que lo que hicieron fue, básicamente, una nueva instalación cerca de la estación para hacer una actualización en temas como el ancho de banda y tener mejor calidad de internet. Al terminar la instalación, en diciembre 2021 la tripulación regresó a Guatemala quedándose una persona, debía monitorear que la antena estuviera enviando y recibiendo información con calidad.

«Fue básicamente como vivir en una pequeña comunidad con personas agradables, por más que uno sea extranjero o latinoamericano, la comunidad lo adopta a uno. Fue una bonita experiencia”, asegura el Ing. Sosa.

También señala que le agrada saber que no fue a hacer turismo, sino que aportó algo que perdurará a la comunidad de La Antártida. “Es un gusto compartir la historia con familia y amigos, ya que es un orgullo como guatemalteco aportar este tipo de trabajo”, finaliza el egresado de Universidad Galileo.

Sobre la estación

La McMurdo Station es la más grande de La Antártida, fue establecida en 1955 y es el centro logístico del Programa Antártico de Estados Unidos, parte de la Fundación Nacional de Ciencias.

Está ubicada en el estrecho McMurdo en el sur de la Isla Ross y allí se lleva a cabo diversa investigación científica sobre aerodinámica, astrofísica y ciencias geospaciales, biología y ecosistemas, geología y geofísica, glaciología, geomorfología y sistemas oceánicos y climáticos. También trabajan cerca de este lugar participantes de los programas de escritores de Antartic Artists.

Todos ellos se vieron beneficiados por el trabajo del equipo de profesionales guatemaltecos, entre ellos el Ing. Sosa, pues mejoraron su conectividad. La vida en la MacMurdo Station es agradable.

“La estación tiene un gimnasio, actividades en la que se practica deporte como fútbol, caminatas, escalamientos. Eso ayuda al tema de salud mental, para que uno no se sienta que solo va a trabajar y automáticamente debe comer y dormir, y repetir eso todos los días”, comparte.

Una carrera con alta demanda

En la actualidad, resulta inimaginable pensar en un mundo sin conexiones por medio de Internet y teléfonos móviles, o sin educación, trabajo y entretenimiento vía satélite o por cable. Se calcula que en la actualidad existen 4.57 mil millones usuarios activos de Internet (Statista, 2020).

Esto abarca el 59% de la población en el mundo. El continuo desarrollo de las empresas de telecomunicaciones, a nivel nacional e internacional, plantea la necesidad de profesionales altamente calificados que mantengan, diseñen, implementen y mejoren la infraestructura necesaria para brindar servicios de alta disponibilidad 24 horas al día, 7 días a la semana y 365 días al año.

Esto requiere de profesionales que sean expertos que puedan aplicar sus conocimientos eficientemente bajo presión. Ante tales necesidades es creada la carrera de Ingeniería en Telecomunicaciones y Redes Teleinformáticas de la Facultad de Ingeniería de Sistemas, Informática y Ciencias de la Computación (FISICC) de Universidad Galileo, que es la primera en su género en la región.

Se trata de un programa único que brinda a sus estudiantes la oportunidad de aprender lo último en tecnologías de telecomunicaciones, acordes a lineamientos educativos de validez internacional como es el caso de las certificaciones técnicas emitidas por la prestigiosa empresa Cisco Systems, que tiene más de 30 años de experiencia en el sector tecnológico.

Dada su preparación de alto nivel y la gran demanda que el mercado exige, todos nuestros egresados mantienen una alta expectativa de contratación a corto plazo y escalan de puesto rápidamente en la organización.

Texto: Departamento de Imagen Corporativa de Universidad Galileo

| Revista Galileo| febrero 2024 |
Etiquetas: Edición 31, Ingeniería en Telecomunicaciones,

Acerca de la revista

Edición No. 31

Publicaciones destacadas, seleccionadas de nuestra revista.