Movilidad Responsable: El Futuro del Transporte Sostenible
En el marco del Día Mundial del Transporte Sostenible, expertos reflexionan sobre la necesidad de transformar la movilidad urbana hacia modelos más ecológicos, accesibles y responsables con el medio ambiente.
Cada 26 de noviembre, El Día Mundial del Transporte Sostenible nos invita a evaluar el impacto de nuestras decisiones de movilidad y a explorar soluciones innovadoras que reduzcan emisiones, promuevan la eficiencia energética y mejoren la calidad de vida.
Este año, las iniciativas se enfocan en la integración de tecnologías limpias, políticas públicas inclusivas y hábitos de transporte conscientes.
Repensando la movilidad: reflexiones de la Ing. Lourdes Socarrás
La Ing. Lourdes Socarrás, directora del Instituto de Recursos Energéticos, comparte su visión estratégica sobre el futuro del transporte sostenible en un artículo especial que resalta el papel clave de las energías renovables y la innovación tecnológica.
En el marco del Día Mundial del Transporte Sostenible, Socarrás reflexiona sobre los desafíos globales y propone un enfoque integral para transformar la movilidad en un motor de desarrollo sostenible y bienestar social.
Mensaje especial por: Ing. Lourdes Socarrás, Directora Instituto de Recursos Energéticos
Cada día la población mundial percibe en gran medida los azotes de las consecuencias del cambio climático. Las extensas sequías, las fuertes lluvias, los incendios implacables, el aumento de la ocurrencia e intensidad de tornados, ciclones, navas, entre otros, son algunos de los eventos que dejan desbastados a millones de personas en todo el mundo, con impactos considerables en la economía mundial.
Las altas temperaturas alcanzadas por el incremento de la concentración de los gases de efecto invernadero en la atmósfera, es la causa que refieren los científicos para la crisis climática que hoy vivimos y que impactará a las próximas generaciones si no somos capaces de reaccionar y actuar.
Este aumento de emisiones de gases de efecto invernadero, representado por el Dióxido de Carbono, tiene su origen en las actividades antropogénicas, entre las cuales resalta la quema de combustibles fósiles para usos finales, como: generación de electricidad, producción de energía térmica para procesos industriales y uso de derivados del petróleo para el sector transporte, fundamentalmente el transporte terrestre.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el sector transporte es responsable de aproximadamente el 23 % de las emisiones globales del Gas de Efecto Invernadero (GEI), dato respaldado por estudios científicos realizados.
Además de esta contribución en GEI, el exceso de vehículos en las vías trae consigo una alta congestión vehicular, que provoca mayor número de accidentes y elevada contaminación del aire en los entornos urbanos, que repercute en incrementos en los costos de salud y aumento de la mortalidad, sin dejar de mencionar el impacto negativo en la productividad del país.
Por esto, dentro del abordaje climático que está ocurriendo mundialmente, el sector Transporte adquiere una gran relevancia, y para resaltarlo la Asamblea General de las Naciones Unidas ha decidido declarar el 26 de noviembre como el Día Mundial del Transporte Sostenible.
«Reconociendo la importante función que desempeñan los sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos en el apoyo al crecimiento económico, el mejoramiento del bienestar social de las personas y el fomento de la cooperación internacional y del comercio entre los países«.
Esta fecha está dedicada a crear conciencia sobre la importancia de implementar sistemas de transporte que minimicen el impacto ambiental y mejoren la calidad de vida en nuestras ciudades.
Con el aumento de la población, la movilidad sostenible se ha convertido en un pilar esencial en la tan necesaria transición energética, que reduce la huella de carbono y mejora la eficiencia en la movilidad de las personas, además de contribuir a la independencia energética, reduciendo el uso de los combustibles fósiles.
Un sistema de transporte sostenible no solo implica el uso de tecnologías de bajas o cero emisiones, como el uso de biocombustibles y la electromovilidad, también enfatiza en la necesidad de desarrollar infraestructuras para las opciones de movilidad sostenible no motorizada como: bicicletas, patinetas, y la creación de espacios peatonales seguros.
El fortalecimiento del transporte público, masivo, asequible, eficiente y seguro es una estrategia imprescindible para disminuir el uso de transporte privado, lo que reduce la congestión vehicular y el impacto ambiental.
El proceso de adopción de estas transformaciones tan necesarias debe reflejar la visión del país, evidenciada en las acciones de los sectores público y privado, incluyendo el importante papel de la academia como proveedor del nuevo conocimiento.
Un paso hacia el futuro: UGalileo y la Asociación de Movilidad Eléctrica de Guatemala unen esfuerzos por la electromovilidad
Por eso el Instituto de Recursos Energéticos de Universidad Galileo, contempla el tema de movilidad sostenible entre sus ejes de desarrollo académico, formando parte importante de sus programas de estudios y líneas de investigación.
En este esfuerzo se acaba de firmar un convenio de cooperación entre Universidad Galileo y la Asociación de Movilidad Eléctrica de Guatemala, en el marco del cual se preparan algunas nuevas iniciativas en desarrollo de capacidades en electromovilidad que se presentarán en el 2025.
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En temas de investigación, el Instituto de Recursos Energéticos (IRE) forma parte del equipo consultor que está desarrollando los insumos técnicos para la actualización de la Estrategia Nacional de Desarrollo con Bajas Emisiones, ENDBE, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, BID, en los sectores Energía y Transporte, donde se incluyen las transformaciones antes mencionadas para el sector transporte.
Como resultado de este proceso se definen escenarios de baja, media y alta ambición, variando el nivel de adopción de las transformaciones que impactan en mayor o menor medida en la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero del parque vehicular, demostrando que esta transición no solo trae consigo importantes beneficios ambientales para el país sino también económicos.
El Día Mundial del Transporte Sostenible nos recuerda que la adopción de prácticas de movilidad responsable es clave para lograr un futuro más verde y saludable.
Los beneficios de un transporte sostenible van más allá de una tendencia ambiental, necesitamos ciudades más limpias, más ordenadas, con menos tráfico, con una reducción significativa en el ruido y la contaminación del aire. En nuestras manos está apoyar y promover iniciativas que impulsen el transporte sostenible, tanto a nivel individual como colectivo.