¿Cuál es la utilidad laboral de los proyectos de graduación?
Toda investigación empieza estableciendo un orden. Algunas ideas surgen por observación y otras surgen por demanda, es decir, que el cliente, el gerente de la empresa o un emprendedor, manifiesta su problema y de allí surge un proceso de análisis y de recopilación de información que permite acercarse a un problema o a una serie de dificultades que tendrán que ser solucionadas mediante la práctica administrativa, mercadológica o tecnológica. Algunas otras veces el desarrollo del proyecto se fundamenta combinando otras disciplinas y ciencias, como la tecnología, la economía o la estadística, que facilitan alcanzar una solución.
Al comparar las estructuras formales de los seminarios, los proyectos de graduación y las tesis, la recopilación de información destaca como un elemento importante ya que permite establecer las expectativas y los alcances que tendrá finalmente la propuesta.
Existen diferentes formas de empezar este proceso de recopilación de información. El más común de todos es el FODA, ampliamente conocido por su dinámica de establecer aspectos positivos y aspectos negativos relacionados con el producto, el servicio, la idea o la marca. Existe el BRIEF en donde a través de una serie de preguntas ordenadas se genera un acercamiento con el producto, sus características intrínsecas y extrínsecas, su valores económicos, sus cadenas de distribución, sus experiencias exitosas o fallidas de promoción, los triunfos o fracasos en ciertas plazas de venta, las actividades perceptibles de la competencia y otras manifestaciones propias del mercado y el consumidor.
La AUDITORIA DE MARKETING, que empieza su colección de datos internamente en la empresa para establecer procesos de producción, estrategias de mercadeo, comportamientos de personal, relación con la cadena de distribución y sobre todo, los métodos y comportamientos de venta del producto hasta que llega a las manos del consumidor final. Idealmente el desarrollador debe de tener acceso a otros datos relevantes como el plan de mercadeo, balances entre producción, bodega y ventas y obviamente, planificaciones estratégicas construidas por los ejecutivos de la empresa. Finalmente y con igual importancia, se puede recurrir a LA ENTREVISTA, en donde los responsables de la empresa manifiestan sus puntos de vista, sus ideas, sus inquietudes y su visión de lo que puede llegar a ser la marca a corto, mediano y largo plazo. En algunos otros casos, la información puede encontrarse en lo que se conoce como INFORMACIÓN DE SEGUNDA MANO ya que esta contiene datos que fueron elaborados con anterioridad y que contienen reseñas muy valiosas acerca del producto, la empresa, el consumidor y la competencia.
De la recopilación de información y acercamiento que se logra con el producto y la empresa, se identifican el o los problemas. Problemas de administración, de mercadeo, de tecnología, de informática, calidad, reingeniería, recurso humano o de gerencia.
De un problema general, se establece el gran objetivo del proyecto y de los otros problemas relacionados o colaterales, surgen los objetivos específicos. Es decir, cada objetivo representa una acción que el futuro profesional desarrollará para solucionar los problemas encontrados.
Los expertos sugieren que todo objetivo se redacte a partir de un verbo en infinitivo: comparar, medir, establecer, comprobar, diferenciar, etcétera.
Tanto el objetivo general como los objetivos específicos deben de responder a los siguientes cuestionamientos: Qué, a través de qué, para qué y para quién. Por ejemplo, un objetivo genera podría ser: Establecer un programa de mercadeo para promover la venta del producto tal, en el mercado guatemalteco. Ejemplos de objetivos específicos: Comparar el producto tal con los productos de la competencia, para encontrar sus diferencias comerciales en el mercado guatemalteco. Descubrir las operaciones comerciales de la competencia para establecer las acciones mercadológicas de la marca tal, que se comercializará en el mercado guatemalteco.
Es importante recordar que todo objetivo tiene que ser realizable, medible y factible. De lo contrario, no representarán todas y cada una de las acciones que se llevarán a cabo en el desarrollo del proyecto.
La propuesta o solución al problema, depende de la especialidad profesional que se está desarrollando, al igual que el establecimiento de los objetivos.
Se recomienda que la o las propuestas de solución sean evaluadas primariamente a través de una herramienta de investigación en donde se valide el área objetiva del proyecto, el área de contenido y su funcionalidad. Esta evaluación puede hacerse preferiblemente con expertos en el tema, el dueño de la marca, empresa o idea y con el grupo de personas que se verán beneficiados con el proyecto. Con los resultados de la validación surge la propuesta final.
Tanto el tema, los objetivos del proyecto y las preguntas de la validación, tienen relación con las conclusiones y las recomendaciones. Finalmente, la American Psychological Association – APA – por sus siglas en inglés, sugiere un orden formal para presentar la bibliografía.
Es importante destacar que todas las guías para la elaboración de proyectos, seminarios y tesis han tomado en cuenta las demandas y competencias que las empresas y los CEOS esperan de los egresados universitarios. Es decir, estas guías son un reflejo de cómo las empresas esperan que se desarrolle un trabajo profesional. En pocas palabras las guías de seminarios, de proyectos y de tesis, orientan cómo un profesional elabora y presenta un proyecto formalmente.
Por: Lic. Rualdo Anzueto, Vicedecano Facultad de Ciencias de la Comunicación (FACOM).
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