Los aspirantes deberán contar con las siguientes capacidades y competencias adquiridas previamente a lo largo de su trayectoria académica y profesional:
Vocación hacia el problema de adicción, conocimientos del idioma inglés para la comprensión de material técnico científico, conocimiento del uso de procesadores, manejo de Windows y Office, habilidades de razonamiento numérico y verbal, sensibilidad social, equidad, respeto por la diversidad e interculturalidad.
Deseable pero no necesario, que cuenten con experiencia en el tema de adicciones, ya sea en investigación, prevención, tratamiento o manejo de proyectos afines.